domingo, 22 de noviembre de 2009

Os escribo de nuevo

(Foto de mis Tíos)

Queridos Don Bigotes, Guardián de las Palabras y Dulce Marinero. Como veis, os vuelvo a escribir pues ha pasado un tiempo y este día es uno de los que me ha marcado y no olvido con facilidad ya que fue cuando te fuistes por último tú Dulce Marinero. Os dedico como la otra vez esta carta que con tanto anhelo quería escribiros. No sabía como empezarla, lo reconozco, pero una vez más me vuelven a salir las palabras desde el corazón.

Os cuento, por aquí las cosas van de cuando en cuando, es decir con momentos buenos y a veces regulares e incluso admito mis ganas de estar todos otra vez reunidos como en los viejos tiempos y disfrutar al máximo los buenos momentos.

Yo he hecho unos cambios en mi vida como aprender a bailar Folclore, a estar con mi gente a la que quiero y dejando aquellos que ni siquiera se daban cuenta de que estaba con ellos (son cosas que pasan), sigo con mis dotes y mis hobbies mejorándolos cada vez que puedo, me esfuerzo en ser más yo mismo, escuchar mi corazón y luchar día a día aunque a veces me pare por las malas circunstancias pero, una vez que se me pasa, Sigo ADELANTE. Os hecho muchísimo de menos pero se que estáis bien y cuando llegue mi día (pues no se cuando será y no me voy a preocupar por eso y sigo viviendo mi vida al máximo), hagamos un Tenderete con Música y Baile vale.

Con todo mi cariño, os dedico a vosotros y a mis lectores, mi gente, mis amigos, mi familia, este cuento que tiene que ver con encontrar algo, el sentido de nuestras vidas, el porqué de lo que hacemos. Dicho cuento se titula El Buscador y como siempre, lo cuento a mi manera. También como aniversario, dejo un enlace del primer tema que les dediqué. Espero que ambos os gusten ;-).


El Buscador

Esta es la historia de un Buscador. Como os dije antes, es alguien que busca y no a veces es alguien que encuentra, también puede ser que no sepa lo que está buscando o sencillamente, es una persona cuya vida es una búsqueda continua.

Pues un día, el buscador sintió deseos grandes de iniciar una aventura, de ir hacia la ciudad de Kammir. Como había aprendido a hacer caso de su buena intuición, decidió partir hacia dicha ciudad.

Tras dos días de intenso camino, pudo ver a lo lejos, Kammir. En cuanto estaba cerca de la ciudad, vio una colina por el camino de la derecha tapizada con un césped verde precioso, también con muchísimos árboles, flores y pájaros revoloteando alegremente. Otro detalle importante, era que lo rodeaba una pequeña valla de madera lustrada y una puerta enorme de bronce que, como suele pasar, lo invitaba a entrar.

Como era su búsqueda y no tenía prisa, decidió entrar para pasear, ver aquel hermoso lugar y descansar un rato después del viaje. Al adentrarse, se llevó una sorpresa pues se trataba de un cementerio y las lápidas estaban distribuidas al azar entre los árboles. No entendía aquello y comenzó a leer las inscripciones:

Abdul Tareg, vivió 8 años, 6 meses, 2 semanas y 3 días.

Al leer la primera, se sobrecogió e incluso sintió una gran pena por ese pobre niño que no pudo vivir mucho tiempo. Seguido de su curiosidad, leyó otra que estaba al lado diciendo:

Yamir Kalib, vivió 5 años, 8 meses y 3 semanas.


El buscador leía una y otra lápida, todas con las inscripciones similares, no podía creerse aquello pues todos los que estaban allí enterrados eran niños y lo más impactante era que el único que había vivido durante más tiempo era uno con 11 años. Ha medida que pasó el tiempo, fue invadido por la tristeza de haber contemplado todo aquello así que se sentó y se puso a llorar por todos esos niños.

El vigilante del cementerio que pasaba por allí, se le acercó y le preguntó si lloraba por un familiar.

-No, no lloro por ningún familliar- le dijo el buscador-. ¿Que fue lo que sucedió en la ciudad? ¿De que murieron esos niños? ¿Ha sido por un accidente o es que hay una maldición?

El vigilante sonrió y le dijo:

-Puede estar tranquilo pues todas esas personas murieron en edades avanzadas. No ha habido ningún accidente y tampoco se trata de una maldición. Verá, aquí en nuestra ciudad tenemos una costumbre que le voy a explicar:

-Cuando un joven cumple 15 años, se le regala una libreta como la que tengo yo colgado, y una vez que tenemos esta libreta, anotamos en ella todos nuestros buenos momentos: los atardeceres, un viaje deseado, durante la ceremonia de la boda o estando con los amigos, con la familia, etc. En la parte izquierda, escribimos lo que fue disfrutado y en la parte derecha, cuánto tiempo duró el gozo. En pocas palabras, anotamos cada momento que hemos disfrutado de la vida.

Cuando alguien se muere,
es nuestra costumbre
abrir su libreta
y sumar el tiempo de lo disfrutado
para escribirlo sobre su tumba.
Porque ese es para nosotros
el único y verdadero TIEMPO VIVIDO.

FIN

***Este Relato proviene del libro de Jorge Bucay "Cuentos para pensar" y me lo contó la Mamá de mi Cuñada a la que le doy las Gracias por este cuento tan bonito.

martes, 10 de noviembre de 2009

Ños con la Ilustración


Ños es nuestra expresión más conocida cuando vemos algo increíble como en este caso. Hace un tiempo, mi hermano alias Kifonce, me mandó un correo sobre este chico que ilustra con bolígrafo. Se llama Juan Francisco Casas y lo digo, es el amo y señor de los bolígrafos Bic (creo que es el que utiliza XD) pues hay que ver todas las virguerías (maravillas para que me entendáis XD) que hace el muchacho.

Como iréis viendo, son "Fotos" pero todo en azul (es mi color favorito y no es por peloteo XD). La verdad es que me gusta ver, leer y admirar a artistas así (con otras cualidades también como poesía, escritura, pintura u otros temas relacionados con el arte) que hay pocos y en el mundo del arte se requiere cada día más innovación y atrevimiento. Para finalizar, os dejo con un enlace de su Web y algunas imágenes que me han gustado por sus detalles y expresiones. Ahora, a conocer a este pedazo de artista.